domingo, 28 de septiembre de 2014

Crisis de entre Guerras (17° Parte)



EL AUGE DE LOS FASCISMOS
Tercera Parte: El camino al Tercer Reich


La crisis de 1930 y el ascenso del Nacionalsocialismo



Reunión del Partido Nazi en 1930






Después del fracaso de la intentona de Munich, el NSDAP (NationalSozialistische Deutsche Arbeiterpartei, Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán) de Adolf Hitler fue decayendo. La estabilización del marco dejaba entrever la posibilidad de una restauración económica y en política internacional se entraba en una época apacible gracias a los planes Dawes y Young. 

Friedrich Ebert, primer presidente de la república de Weimar, había fallecido en 1925, y en las elecciones presidenciales de abril de ese año, los conservadores se habían congregado en torno del héroe de la Gran Guerra Paul von Hindenburg, quien recibió 14.600.000 votos frente a los 13.700.000 de su rival, el centrista Wilhem Marx. Hindenburg como presidente  se mostró leal a la distensión política y a la estabilización económica entre 1925 y 1930. 

La situación era, pues, menos favorable para los movimientos nacionalistas de extrema derecha. Pero sobrevino la crisis mundial y al iniciarse la década de 1930, unos 17 millones de alemanes sobrevivían mereced de la asistencia pública.El socialdemócrata Hermann Müller, que había ganado en las elecciones de 1928, fue incapaz de detener la presión y la crisis económica desvaneció la alianza que lo había llevado al cargo de canciller.

Boleta de las elecciones de 1925
El nuevo canciller, Heinrich Brüning, del partido Católico, actuó con rigor: inició draconianos recortes presupuestarios y aumentó los impuestos. El Reichtag ("parlamento") se opuso, por lo que Brüning lo disolvió. En las elecciones de 1930 no obtuvo la mayoría, mientras que el nazismo obtuvo un espectacular avance: de 12 escaños obtenidos en dos años antes, pasó a 107.

Ante el empuje de los nazis, los socialdemócratas toleraron como "un mal menor" a Brüning, y Hitler postergó la idea de promover una revolución al darse cuenta de que el NSDAP podía llegar al poder por la vía legal. Entretanto, las SA debarataban los mitines y reuniones de socialdemócratas y comunistas, el NSDAP operaba como oposición parlamentaria en el Reichtag. Fue entonces cuando la gran industria decidió brindar oficialmente su apoyo financiero a los nacionalsocialistas. El magnate metalúrgico Fritz von Thyssen, en su libro "Yo subvencioné a Hitler", confiesa: "Personalmente he entregado una suma global de un millón de marcos al partido nazi".

Otra fuente de financiamiento empresarial de los nazis fue el cártel International Gesellschaft Farbenindustrie A.G.  (que reunía a los gigantes alemanes de la industria química:  Badische Anilin, Bayer, Agfa, Hoechst, Weilerter-Meer, Griesheim-Elektron). Los sucesivos directores de I.G. Farben apoyaron al nazismo, en general, y a Hitler, en particular, de forma totalmente directa. Existe documentación sobre transferencias superiores a los 400.000 marcos realizadas en favor de Adolf Hitler y su partido.

También los grupos AEG y OSRAM (en parte propiedad de la GE, que por ese entonces le pertenecía al GP Morgan); Standard Oil (de los Rockefeller), la ITT (también perteneciente al GP Morgan) y la Ford Motor Company mantuvieron estrechas relaciones con el régimen nazi.

En 1932, al terminarse el mandato presidencial, Hindenburg se volvió a presentar, y esta vez se enfrentó con Hitler, quien se había nacionalizado alemán, en un ballotage luego de que ningún candidato reuniera la mayoría necesaria para consagrarse en primera vuelta. Hindenburg logró ganar con el 53% gracias al apoyo de conservadores y socialdemócratas, pero Hitler duplicó los votos obtenidos en 1930.


La agonía del sistema parlamentario

Hindenburg, enero de 1932


El sistema parlamentario había muerto, pues todo el poder quedó concentrado en las manos del presidente y las decisiones importantes fueron adoptadas por un círculo íntimo de colaboradores de Hindenburg; entre los que figuraban su hijo Oskar, el secretario de Estado Meissner, el aristócrata Von Papen y el general Kurt von Schleicher. El principal sostén entre los grupos poderosos del gobierno de Hindenburg eran los latifundistas del norte.

En mayo de 1932, Hindenburg reformó su gabinete, pues Schleicher le sugirió asociar a los nazis al gobierno para hacerlos asumir responsabilidades políticas. Pero el nuevo gabinete obtuvo menos apoyo que el anterior. El canciller Franz von Papen era un junker católico, oficial de carrera y diplomático sumiso y ambicioso, y Schleicher, se proponía servirse de él para acercarse a los nazis.

En Prusia, la Socialdemocracia estaba en el poder, lo que le permitía el control de la policía en el Gran Berlín y en el estado prusiano. Los nazis, aliándose a los comunistas, redujeron a la minoría al socialdemócrata Braun en el parlamento prusiano. Luego Papen destituyó a Braun y asumió en calidad de comisario del Reich, lo que constituyó un verdadero golpe de Estado. Detrás de Papen y sus "amigos del monóculo", como se les llamaba, estaba el presidente del Reich y su ejército. 

En las elecciones del 31 de julio de 1932, Hitler consiguió un verdadero triunfo. El NSDAP obtuvo 13.700.000 sufragios; el 37,8% del total, y con 230 diputados sobre un total de 608, se convertía en el partido más poderoso de Alemania. Goering fue nombrado presidente del Reichtag, y Hitler se negó a una proposición de coalición política con el gobierno de Hindenburg.

En las elecciones de noviembre de 1932 (el Reichtag había sido disuelto por una moción de censura) los nazis perdieron 2 millones de votos y 32 escaños, y un mes más tarde experimentaron un nuevo retroceso en las elecciones de Turingia. A Papen se le ocurrió conferir poderes dictatoriales a los conservadores, disolver el Reichtag y gobernar con el apoyo del presidente y del ejército. pero Schleicher convenció a Hindenburg en que esa maniobra conduciría a una guerra civil. Papen fue desplazado y sustituido por Schleicher, quien le volvió a sugerir a Hindenburg "domesticar" a Hitler haciéndolo participar en el gobierno. Hitler sería nombrado canciller y Papen sería su vice.

Hitler asumió la jefatura del gobierno alemán el 30 de enero de 1933. El llamado "nuevo orden" se ponía en marcha. El Reichtag fue disuelto otra vez y se convocó a nuevas elecciones para el 5 de marzo, Las SA y las SS emprendieron una campaña de terror contra los adversarios políticos, ayudados por la policía, que estaba a las órdenes de Goering: asaltos nocturnos domiciliarios, raptos, encarcelamientos sumarios y atentados con numerosas víctimas (especialmente entre socialdemócratas y comunistas) se sucedían mientras el partido nazi alternaba promesas demagógicas y amenazas. Habría estallado una guerra civil, pero las fuerzas armadas y de seguridad, ya habían tomado partido por un solo bando.

Hitler con su primer gabinete, el 31 de enero de 1933. Conformado principalmente por conservadores, que deseaban controlar a Hitler, muy pronto fueron subyugados. (Al frente: Hermann Göring y Franz von Papen a su izquierda)


El incendio de Reichtag

El incendio del Reichstag permitió a Hitler
acelerar sus planes de persecución contra
sus opositores, acusándolos de ser golpistas






El terror aumentó después del incendio del Reichtag, el 27 de febrero de 1933, del que fue acusado un comunista holandés llamado Marius van der Lubbe; un vagabundo medio loco que declaró haberlo hecho sólo. Rápidamente fue condenado a muerte y ejecutado.

Varios miembros de las SA dirigidos por Karl Ernest, se introdujeron en el edificio por un túnel que arrancaba del palacio en el que vivía el presidente del Reichtag, Hermann Goering, y mientras Van der Lubbe trataba de encender el fuego con trapos y maderas, los agentes de la SA usaban un líquido industrial con base de fósforo y celuloide. El plan de los nazis estaba ideado antes de que Van der Lubbe entrara en acción (si es que lo hizo). La presencia de éste, no obstante, fue la coartada perfecta para hablar de un crimen político, cosa que el pobre perturbado holandés jamás entendió, sirviendo así de chivo expiatorio.

Los nazis explotaron para su propaganda el incendio del Reichtag y se publicó un decreto para la "protección del pueblo y del Estado", que suspendía todas las garantías constitucionales y las libertades políticas. De esta suerte, ejerciendo presión sobre los partidos rivales, las elecciones tuvieron el resultado deseado por el NSDAP. el partido nazi obtuvo más de 17 millones de votos (cerca del 44%) y 288 escaños para el nuevo Parlamento.

Reunido el nuevo Raichtag, se sometió a este un proyecto de ley por el que le otorgaba al gabinete poderes dictatoriales por un periodo de 5 años, el que fue aprobado por 411 votos contra 91. De este modo, Hitler alcanzaba "legalmente" su objetivo: la dictadura.

Poco a poco se fueron eliminando otras tendencias dentro del propio gobierno, y los demás partidos fueron disueltos o prohibidos. El antiguo vagabundo de Viena se había convertido en el Führer (guía, caudillo supremo de Alemania entera, con un poder que nunca habían tenido de Bismark ni ningún káiser


La "noche de los cuchillos largos"

Roehm, jefe de las SA, esta interesado por cierto tipo de socialismo muy elemental y utópico, y pretendía convertir a las SA en el núcleo de un nuevo ejército alemán de base popular, del que quería ser jefe; por lo tanto, se estaba convirtiendo en un poderoso competidor de Hitler por el poder dentro del partido, a pesar de la estrecha amistad que los unía. 

En el ala derecha, Papen y los conservadores alemanes se alarmaban más que por la brutalidad del régimen que se estaba imponiendo, por la inconsistencias de la ideología nazi. El ejército y Hindenburg intimaron a Hitler a que hiciera cambiar de opinión o destituyera a Roehm. Hitler se mostró vacilante, al tiempo que ordenó, en secreto, un baño de sangre.

El 30 de junio de 1933, y en días sucesivos, se produjo una espantosa matanza de agentes de las SA, por centenares y en forma sumaria.  La "purga" afectó a Roehm, la personalidad "izquierdista" del NSDAP, y a Gustav von Kahr. El propio Papen, quien había facilitado el ascenso de Hitler, se salvó por una verdadera casualidad. Sin embargo, Hitler lo nombraría poco después embajador en París. Aquella sangrienta "noche de los cuchillos largos" quebrantó las últimas resistencias internas en el NSDAP.

Al morir Hindenburg, el 2 de agosto de 1934, Hitler no tuvo obstáculo para convertirse en jefe de Estado y comandante supremo del ejército, encantado con su figura desde que había limitado a los milicianos. Rehusó asumir la presidencia, y se hizo nombrar Führer. Era, pues, el jefe de una de las naciones más poderosas del mundo.

El primer entierro de Hindenburg en 1934, en el Memorial de Tannenberg. Hitler está hablando en el atril.


De la insatisfacción a la histeria colectiva

¿Cómo explicarse esta situación y por qué la toleró el pueblo alemán? La Alemania de 1933, como la de 1923, era un país doliente y desesperado; amargado por la derrota de 1918, aunque había otros en igual situación. Además los alemanes habían sido acusados de ser los máximos (cuando no los únicos) responsables y por lo tanto los que debieron pagar las más fuertes reparaciones de guerra. Precisamente, Hitler supo expresar mejor que nadie el espíritu, el rencor, la agresividad y las apetencias imperialistas de sus connacionales. No es que sólo fascinara a las masas con su carisma y la propaganda política, cuando prometía tierras y esclavos del este, muchos alemanes se sentían propietarios de tierras y esclavos rusos. Hasta las alemanas enloquecían por el "bello Adolfo". Pero no todo fue obra de la habilidad de los nazis; el militarismo prusiano se había mantenido vivo durante la república de Weimar, con su ciega veneración del Estado-nación y el culto de la disciplina. 

Alemania entró entonces en un proceso conocido como Gleichschaltung (coordinación), donde el Estado y la sociedad empezaron a ser asimiladas por el Partido Nazi y sus organizaciones. En su deseo de unificar a Alemania bajo un totalitario gobierno central, Hitler primero enfiló la ley habilitante contra el federalismo alemán. Los gobiernos de los estados más grandes, Prusia y Baviera, ya habían sido usurpados, y los gobiernos de otros estados más pequeños pronto corrieron la misma suerte. Hitler promulgó entonces una ley que disolvía todas las dietas regionales, y ordenaba su reconstitución bajo los resultados de las últimas elecciones nacionales. Poco después, Hitler apuntó gobernadores para cada estado, y les concedió la facultad de disolver las dietas y destituir a los jueces. De esta manera, todos los gobiernos regionales empezaron a seguir las directivas de Berlín, y Hitler lograba acabar con la celosa autonomía que los históricos estados alemanes habían defendido desde la Guerra de los Treinta Años.


Mientras Hitler se esforzaba por "coordinar" la sociedad alemana con el Partido, al mismo tiempo obraba para mantener al margen de la sociedad a los elementos raciales "inferiores". El 1 de abril llamó a un boicot contra los negocios judíos, como respuesta a una "campaña mediática" que supuestamente Estados Unidos e Inglaterra habían iniciado en su contra. Una víctima de este período fue Albert Einstein, cuyos activos (casa de verano en Caputh, departamento de su prima y esposa en Berlín, bote y activos financieros en el banco) fueron embargados luego de que se descubriera y considerase como "arma comunista" un cuchillo de pan hallado en su nueva casa de veraneo. Aunque se apostaron camisas pardas frente a los negocios judíos, en general hubo poca violencia, y la ineficaz medida tuvo que ser levantada tres días después. El boicot sí sirvió para sacar de su letargo, aunque temporalmente, al anciano Hindenburg; el Presidente le recriminó al Canciller el hecho de que los veteranos de guerra judíos no estaban siendo tratados como ciudadanos alemanes. Hitler elaboró una vaga promesa para calmarlo, pero el 7 de abril promulgó leyes prohibiendo la presencia de judíos en la administración pública, y restringió su presencia en la abogacia y la medicina. Luego limitó el número de estudiantes judíos en las universidades, bajo el pretexto de prevenir el "hacinamiento". No obstante, las medidas de 1933 no fueron consideradas peligrosas por muchos judíos, que creían que el objetivo de Hitler se limitaba a hostigar a los judíos provenientes de Europa oriental.


Luego de que falleciera Hindenburg y fueran aniquilados los oponentes de su propio partido y a colaboradores de dudosa fidelidad, la eliminación de diversos grupos raciales, políticos, sociales y religiosos que el nazismo consideraba "enemigos de Alemania" y "razas impuras", entró en un proceso de radicalización progresiva que condujo a los campos de concentración para el genocidio sistemático de comunistas, judíos, testigos de Jehová, gitanos, enfermos mentales y homosexuales.


El Tercer Reich

Habiendo obtenido el poder político que necesitaba, Hitler llegó a obtener el apoyo y convencer a la mayoría de los alemanes de que él era su salvador de la economía ante de la depresión, del comunismo, el "judeo-bolchevismo", y el Tratado de Versalles, junto con otras minorías "indeseables". Los nazis eliminaron la oposición a través de un proceso conocido como Gleichschaltung.

Hitler estuvo a cargo de una de las mayores expansiones de la producción industrial y la mejora civil como nunca se había visto en Alemania, en su mayoría sobre la base de la deuda de flotación y el rearme. Durante un discurso de la Organización de las Mujeres Nacional Socialistas en septiembre de 1934, Adolf Hitler argumentó que para la mujer alemana su mundo era "su marido, su familia, sus hijos, y su casa".

Esta política fue reforzada al instaurar la Cruz de Honor de la Madre Alemana, junto con incentivos económicos para la mujer que tuviera cuatro o más hijos. La tasa de desempleo se redujo sustancialmente, en su mayoría a través de la producción de armas, construcciones de obras civiles (Organización Todt) y el envío de la mujer a casa, para que los hombres pudieran ocupar sus puestos de trabajo. En vista de esto, se llegó a afirmar que la economía alemana logró emplear a todos, al menos según la propaganda de la época. Gran parte del financiamiento para la reconstrucción y el rearme vino de la manipulación de la moneda por Hjalmar Schacht, incluyendo los créditos a través de las cuentas mefo. Los efectos negativos de esta inflación se compensaron durante los años siguientes por la adquisición de oro de las tesorerías de las naciones anexadas.


Hitler en la inauguración de una Autobahn

Hitler también estuvo a cargo de una de las más grandes campañas de mejora de la infraestructura en la historia alemana, con la construcción de decenas de represas, autopistas, ferrocarriles, y otras obras civiles. Hitler insistió en la importancia de la vida familiar: los hombres debían ser el "sostén de la familia", mientras que las prioridades de la mujeres debían ser la educación de los hijos y las tareas domésticas. Esta revitalización de la industria y la infraestructura se produjo a expensas del nivel general de vida, al menos para los que no fueron afectados por el desempleo crónico después de la República de Weimar, ya que los salarios se redujeron ligeramente durante la Segunda Guerra Mundial y se aumentó en un 25% costo promedio de vida. Los obreros y los agricultores, los votantes frecuentes del NSDAP, sin embargo, registraron un aumento en su nivel de vida.

El gobierno de Hitler auspicio la arquitectura en una escala inmensa, junto con Albert Speer que pasaría a ser el famoso "Arquitecto del Reich". Si bien como arquitecto fue importante en la aplicación clasicista y la re interpretación de la cultura alemana, Speer demostró ser mucho más eficaz como ministro de armamento en los últimos años de la Segunda Guerra Mundial. Todos estos avances fueron ampliamente explotados por el Ministerio de propaganda dirigido por Goebbels.


Hitler desfila en el Estadio Olímpico de Berlín junto a miembros del Comité Olímpico Internacional.

En 1936, Berlín fue sede de los Juegos Olímpicos de verano, que fueron inaugurados y dirigidos por Hitler como una forma de demostrar la superioridad aria alemana sobre todas las demás razas. "Olympia", la película sobre los juegos y otras películas documentales de propaganda para el partido nazi fueron dirigidas por la cineasta personal de Hitler, Leni Riefenstahl.

Aunque Hitler hizo planes para una Breitspurbahn (una red de ferrocarriles de amplio calibre) estos fueron cancelados tras el inicio de la II Guerra Mundial. De haber sido construido el ferrocarril, su calibre habría sido de tres metros, siendo incluso más amplio que el ferrocarril Great Western de Gran Bretaña. Hitler también contribuyó al diseño de un automóvil accesible y práctico para el pueblo, automóvil que más tarde se convertiría en el Volkswagen Tipo 1, cuyo diseño y construcción le fue encomendado al ingeniero Ferdinand Porsche. La producción de este también fue aplazada a causa de la guerra.


Documental


Segunda parte de la serie documentales sobre la Segunda Guerra Mundial llamados "Apocalipsis" de National Goegraphic de EEUU y la BBC de Reino Unido, Unos años después, a modo de precuela lanzaron dos capítulos con la historia del ascenso del hitlerismo en Alemania.





© carlitosber.blogspot.com.ar, Septiembre 28 MMXIV
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1 comentario:

  1. Pueso hacerte un comentario por mail. Me fije en la pagina y no tenes ninguna casilla de contacto. MI nombre es Úrsula y mi mail es macarolesrellenos@gmail.com.

    Espero no ser indiscreta . También espero tu contacto. Gracias me encanta tu blog

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